El pleno del Ayuntamiento de Almoradí, gobernado por el PP, acordó ayer suspender provisionalmente la adjudicación del contrato de la basura a la empresa la Generala, a la espera de un informe técnico solicitado a la Generalitat. La decisión se produce un mes después de la irrupción en el pleno del actual concesionario, el empresario Ángel Fenoll, cabecilla del caso Brugal, para reclamar una deuda de 2 millones de euros.
Por otro lado, el PSPV en la Diputación pidió una reunión del consorcio de residuos de La Vega Baja para analizar la saturación del vertedero.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 4 de marzo de 2011