Quid pro quo. El presidente gallego quiere que la caja siga la hoja de ruta que coincide con los planteamientos que la conselleira de Facenda hizo en el Parlamento y que relega al último lugar la posibilidad de explorar una unión a través de la fórmula de un SIP o fusión fría (manteniendo la marca pero compartiendo el negocio con otras cajas). Alberto Núñez Feijóo hizo ayer esta petición antes de decir que él también será coherente con la apuesta del Ejecutivo gallego, que pasa por la transformación de Novacaixagalicia en la mayor accionista de un banco asociado al que traspasará su negocio.
En el sector financiero las palabras de Feijóo se interpretan como un aviso a navegantes, dado que la caja presidida por Julio Fernández Gayoso sigue contemplando la vía del SIP como una de las posibles para recapitalizarse. Pero esto no entra dentro de los planes del Gobierno gallego, aunque el PP sí abrazó esta fórmula en comunidades como Madrid, donde la entidad que preside Rodrigo Rato se ha unido a otras cinco manteniendo su marca. Feijóo aseguró que la caja mantiene contactos con distintos fondos de capital para mantener la galleguidad y no para "diluirla". "Lo mejor para Galicia es mantener una caja solvente", aseguró, pero también que tenga "control sobre un banco".
Críticas a Blanco
Habló de que no hay que rendirse "antes de empezar la batalla", y recordó que existen varias posibilidades, entre las que está la de "hablar con los mercados, como están haciendo otras cajas". Al hilo de esta afirmación, recordó que ya ha defendido esta postura "en la primera tanda" de movimientos del sistema financiero español, antes de la fusión, cuando se evidenciaron "intereses para que Galicia diluyese sus cajas en otras". Feijóo advirtió de que ahora no dudará en volverlo a hacer.
Las palabras sobre las cajas de José Blanco el pasado miércoles en Santiago, no sentaron nada bien en la Xunta. El ministro se refirió ese día a que a Galicia "siempre le fue bien cuando miró al exterior", en alusión a posibles alianzas. "Lamento que haya otros responsables políticos que les da igual que haya una entidad en la comunidad que tenga como objetivo prioritario el apoyo a sus sectores estratégicos", respondió Feijóo. "A mí no me da igual ni como gallego, ni como político ni como presidente de la Xunta", zanjó.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 4 de marzo de 2011