El PP, "y también muchos ciudadanos", según su secretaria general, María Dolores de Cospedal, atribuye el cambio en el límite de velocidad a un "afán recaudatorio" del Gobierno. Pero para que esto fuera así, la cantidad ingresada por el supuesto aumento de multas propiciado por la medida debería ser superior al gasto que esta conlleva para el Ejecutivo.
- El gasto. El plan de 20 medidas de ahorro energético aprobado por el Consejo de Ministros el viernes requiere de una versión estimada de 1.151 millones a cargo de la Administración central.
- El ahorro. El plan prevé ahorrar 2.300 millones de euros anuales en importaciones energéticas, o lo que es lo mismo, 28,6 millones de barriles de petróleo. Ese ahorro beneficiaría a las Administraciones, a las empresas y a los ciudadanos.
- Los impuestos. Al gasto desembolsado por el Gobierno para hacer posible ese ahorro, se suma el dinero que dejará de ingresar Hacienda por el impuesto de hidrocarburos. En 2009 (último año con cifras consolidadas) sumó 9.581 millones por este concepto. Un recorte de un 5%, que es lo que el Ejecutivo espera para las importaciones de crudo, supondría ingresar en las arcas públicas 479 millones de euros menos. Y a eso habría que sumar el impacto sobre el IVA.
- Las multas. Según los Presupuestos Generales del Estado de 2011, se prevé ingresar 409 millones de euros por las multas de tráfico.
- El balance. En conclusión, las medidas contemplan una inversión del Gobierno de 1.151 millones, a los que hay que sumar los al menos 479 millones que dejará de ingresar. En total, 1.630 millones de coste. Para compensar, las multas deberían multiplicarse por 3,4.
- El conductor. El ahorro para los conductores es más previsible. El Gobierno espera una reducción del consumo de gasolina del 3%. Si llenar el depósito cuesta alrededor de 70 euros, el ahorro es de unos dos euros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 8 de marzo de 2011