La perrera Parque Animal, de Torremolinos (Málaga), cuyos responsables se encuentran imputados por maltrato animal y otros delitos, podrá reabrir sus puertas después de que Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 7 de Málaga haya dejado en suspenso cautelarmente la orden de cierre del recinto por seis meses y la multa de 15.000 euros decretada por el Ayuntamiento el pasado febrero.
El juzgado ha citado a los responsables de la perrera y a los representantes municipales el próximo miércoles para escucharles y posteriormente decidir si revoca definitivamente la sanción, o bien la mantiene o la modifica, según informó el consistorio en un comunicado.
Los responsables de Parque Animal fueron detenidos por agentes de la Guardia Civil. Según la investigación, con el ánimo de ahorrar costes, los dueños de la perrera sacrificaban mascotas con dosis de veneno inferiores a las necesarias para garantizar una muerte rápida y sin dolor para el animal.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de marzo de 2011