Un joven español de 23 años apareció el lunes por la tarde muerto en su casa, en Salt (Gironès) en extrañas circunstancias. El chico tenía un golpe en la cabeza, aunque no está claro que esa sea la causa de la muerte.
El domingo por la mañana, un trabajador servicio de limpieza del Ayuntamiento encontró al chaval inconsciente, con el golpe en la cabeza. Llamó a la Policía Local y los agentes le llevaron al hospital. Pero el joven no quiso esperar y se fue del centro antes de que le atendiesen.
El chico, que vive con un familiar, volvió a su casa y se encerró en su habitación. Al día siguiente, al ver que no salía del cuarto, su allegado se extrañó y entró. El joven estaba muerto.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de marzo de 2011