El trabajo del Consejo de la Juventud de Euskadi (EGK) "corre peligro" por el recorte en un 20% de las ayudas que recibe del Gobierno, según criticó ayer el presidente de la entidad juvenil, Batiste Ezeiza, en una rueda de prensa en Bilbao. El Consejo, que agrupa a un total de 55 entidades que trabajan para promover el asociacionismo y mejorar las condiciones de vida de los jóvenes, "ha sufrido un recorte drástico en su presupuesto", recalcó Ezeiza.
Las cifras que maneja el EGK concluyen que el Ejecutivo le subvencionó con 331.000 euros en 2009, cifra que rebajó el año pasado hasta 294.000 euros. En el presupiuesto de este año la partida correspondiente ha vuelto a descender, hasta quedarse en 265.000 euros.
Para combatir este recorte, el Consejo ha aplicado "contundentes medidas" de reducción del gasto, de manera que ha "limitado al máximo" sus proyectos y ha renunciado a cubrir un puesto de trabajo, a pesar de lo cual ha arrancado el presente ejercciio con un déficit de 24.727 euros.
La Comisión Permanente del Consejo considera que la crisis económica "no explica por sí sola esta reducción", sino que también ha habido una "falta de voluntad política; una falta de apuesta por el modelo de EGK que no solo se plasma en las subvenciones, sino que se deja notar también a otros niveles".
"Alarmismo"
De hecho, según señalaron sus portavoces, el actual borrador de ley de Juventud prevé crear un Instituto de Juventud sin detallar el papel que deberá jugar la red asociativa. A ello se añade que el Gobierno "ha pedido a EGK que cambie su actual figura jurídica, así como la ley y el decreto que rigen su actividad, lo que podría afectar a su actual autonomía de funcionamiento".
Los representantes del Consejo precisaron que la semana pasada inició una campaña de adhesiones a un manifiesto en su defensa, al que ya se han sumado más de 35 asociaciones y colectivos.
Fuentes de la Dirección de Juventud admiten el recorte del 20% en las ayudas, pero atribuyen dicha rebaja en la política de ajustes general de la propia dirección y en la consejería de Cultura en general. "Esta medida no significa en absoluto que no apostemos por el Consejo de la Juventud", señalaron fuentes de la dirección, que calificaron las palabras del organismo de "muy alarmistas".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de marzo de 2011