Una sentencia del Tribunal Supremo ha puesto fin a más de 120 años de litigio geográfico entre los municipios coruñeses de Carballo y Coristanco. Pertenece definitivamente a esta última localidad una franja de terreno de apenas 200 metros, situada entre las parroquias de Rus (Carballo) y Erbecedo (Coristanco) que alberga un colegio, una fábrica de aglomerado de madera y una treintena de casas próximas al río de As Brañas. Los magistrados desestimaron el recurso en casación del Ayuntamiento de Carballo que reivindicaba como suyo ese núcleo, basándose en un acuerdo entre municipios alcanzado en 1889.
Pero una resolución adoptada en 2003 por el Instituto Geográfico Nacional, vuelve a situar los marcos entre ambos municipios de Bergantiños. Un deslinde por el que ese territorio pasa a ser de Coristanco. La Xunta, mediante un decreto de 2004, corrobora esa resolución sobre la confusión de lindes en esa zona entre ambas localidades. Pero el Ayuntamiento de Carballo decidió impugnar esa decisión en los tribunales.
"Era nuestra obligación defender nuestro principio de territorialidad hasta el final, esa zona siempre había sido nuestra hasta ahora", explicó ayer el alcalde, el nacionalista Evencio Ferrero. El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia le quitó la razón en una sentencia de 2007 y ahora es el Supremo el que zanja el litigio al rechazar el recurso de casación de Carballo. El colegio, la fábrica y los vecinos de esa zona colindante con el río pertenecen al término municipal de Coristanco. El alto tribunal considera adecuado el fallo de los magistrados gallegos que consideraron que debía prevalecer sobre el acuerdo de deslinde de 1889 otro posterior que data de 1928. En el más antiguo no intervinieron representantes de Coristanco, por lo que el tribunal considera que el único válido es el adoptado "por consenso" de las localidades en litigio durante cuatro décadas. Ese último está rubricado por ediles de Coristanco, Ponteceso y Carballo.
"Fue una zona sobre la que nunca estuvo claro el deslinde, pero ahora ya sí", acató Ferrero. El Supremo condenó al ayuntamiento que preside a pagar las costas , con un máximo 1.500 euros por cada letrado que intervino en el proceso. El alcalde de Carballo sólo lamenta que la justicia tardara tanto tiempo en resolver este conflicto. No es el primero con Coristanco que pierde en el Supremo la capital de la comarca de Bergantiños. Y está en negociaciones "para deslindar" otras zonas con municipios vecinos como Laracha. El regidor confía en lograr acuerdos sin ir a a los tribunales. "Ya no hay ningún problema de deslinde pendiente de sentencia", recalcó Ferreiro.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 24 de marzo de 2011