La crisis del euro
| El debate en Europa
El rechazo de las medidas de ajuste de Portugal, que han provocado la dimisión de su primer ministro, José Sócrates, han acelerado las especulaciones sobre el posible rescate financiero del país por parte de la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La presión de los mercados
El día después de la dimisión del primer ministro portugués, José Sócrates, las miradas y las angustias apuntan a las maltrechas arcas públicas. El Gobierno en funciones o "de gestión", según la terminología lusa, tendrá que afrontar entre el 11 de abril y el 11 de junio el pago de 9.500 millones de euros en dos vencimientos de obligaciones del Tesoro.
Las repercusiones en España
La mañana auguraba un terremoto para España en los mercados. Portugal se asomaba al rescate, Moody?s rebajó la calificación de 30 bancos y cajas españolas, que además, poseen 6.500 millones en títulos de deuda portuguesa y 70.000 millones a todo el sistema financiero luso.
Los efectos en el sector financiero
La agencia de calificación Moody's rebajó ayer en bloque la calificación crediticia que otorga a la mayoría de los bancos y cajas de ahorros españoles, con las principales excepciones de Santander, BBVA y La Caixa. La rebaja fue la más brusca acometida por la agencia en España.
Lo que mal empieza mal acaba o se complica hasta extremos peligrosos. Este es el caso de la fusión de Cajastur con la Caja Mediterráneo (CAM, además de Caja Cantabria y Extremadura), que debía formar la tercera entidad con 124.127 millones de activos. Solo su tamaño ya convierte el asunto en nitroglicerina.
No hay como una crisis para desempolvar la vieja dialéctica económica norte-sur. La industria marca el paso de la recuperación y, las diferencias, históricas, se acentúan. Navarra, con un crecimiento del 1,2% en 2010, y País Vasco (0,8%) se apoyaron en las exportaciones de las fábricas de automoción y de las plantas metalúrgicas para dejar atrás la Gran Recesión.