El presidente del Congreso, José Bono, volvió a referirse ayer al debate de la sucesión de Zapatero. Señaló que la única sucesión que ha de interesar a los socialistas "inteligentes" es la de Esperanza Aguirre en Madrid y Francisco Camps en la Comunidad Valenciana. "Lo demás es accesorio, y si nos empeñamos en ello, acabaremos equivocados", añadió.
Bono aseguró que no había hablado del asunto con José María Barreda, que ayer acudió al Congreso para presentar el Proyecto de Ley de Aguas aprobado en las Cortes de Castilla-La Mancha. "Hemos hablado de Alejandro Sanz y [Barreda] no tiene el corazón partío", ironizó sobre los posibles sustitutos de Zapatero: Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón. Barreda añadió que cuanto antes se aclare la situación, "mejor para todos".
Otro de los que se sumó ayer al debate fue el exministro de Economía Carlos Solchaga, en este caso a favor de Rubalcaba: "Es un líder", dijo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 31 de marzo de 2011