La dirección del PSOE se mueve entre el silencio o el estilo enigmático sobre la posición que adoptará el aparato del partido cuando se abra el proceso de primarias para suceder a José Luis Rodríguez Zapatero en las elecciones de 2012. El presidente del Gobierno ha asegurado en su entorno que va a ser neutral y que serán los militantes quienes decidan. Ayer se preguntó a José Blanco, vicesecretario general del PSOE, si tenía alguna preferencia. "Yo seré absolutamente neutral, pero no indiferente", respondió.
Blanco no dejó dudas respecto a que Zapatero mantendrá la secretaría general del PSOE después de que haya candidato. El congreso del partido para elegir a la dirección no se celebrará hasta pasadas las elecciones generales de 2012. "Zapatero ha mostrado su deseo de agotar los dos mandatos: de presidente del Gobierno y de secretario general del PSOE", recordó el vicesecretario de organización del partido.
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Blanco, que está volcado en la campaña electoral para las elecciones del 22 de mayo, aseguró que los militantes "tienen un chute de energía, de moral y de orgullo".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 6 de abril de 2011