Los menores vascos se encuentran entre los que más recurren al teléfono puesto en marcha por la Fundación ANAR para ayudar en toda España a los niños y adolescentes en situación de riesgo, según recoge su informe correspondiente a 2010. Madrid, con 23.450 llamadas, encabeza la clasificación por comunidades, seguida por el País Vasco (21.033) y Castilla y León (20.194).
El pasado año, se recibieron un total de 162.671 llamadas procedentes de toda España, un 72% más que en 2009.
Tres de cada diez de los casos atendidos el pasado ejercicio en este teléfono gratuito (900 202 010) se debieron a situaciones de violencia contra menores, el principal motivo de consulta por quinto año consecutivo y cuya prevalencia se mantiene estable en torno al 30% de los casos. En cuatro de cada cinco casos, los niños que llaman confiesan que su problema no se lo han contado a nadie, según explicó ayer el director de Programas de la Fundación, Benjamín Ballesteros.
La fundación destaca la soledad y el aislamiento que muchos niños y adolescentes demuestran al hablar con quienes atienden el teléfono. En el 23,48% de los casos presentan un elevado estado de ansiedad y durante el pasado año se recibieron 104 llamadas con planteamientos suicidas. El servicio funciona 24 horas todos los días de la semana, es confidencial y anónimo, y está atendido por psicólogos, que cuentan a su vez con asesoramiento de abogados y trabajadores sociales.
Un 85% de las llamadas se debió a casos de violencia machista el entorno familiar, normalmente dirigida hacia la madre. Casi la mitad de las agresiones se producen diariamente. A los chicos, según la Fundación ANAR, les cuesta más pedir ayuda.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 7 de abril de 2011