El lehendakari y secretario general de los socialistas vascos, Patxi López, desautorizó ayer mediante un comunicado de la Presidencia del Gobierno vasco al presidente de su partido, Jesús Eguiguren, por sus declaraciones a Euskadi Irratia. Esta respuesta, expeditiva y áspera, sugiere un punto y aparte en su relación. López le ha sostenido hasta ahora frente a los ataques del PP, conteniendo además el ímpetu de los socialistas más partidarios de marcar distancia ante sus polémicas intervenciones. Las consecuencias internas son una incógnita, toda vez que López fue elegido secretario general tras dimitir Nicolás Redondo merced a un pacto con Eguiguren.
El presidente de los socialistas vascos apuntó a una ruptura del pacto con el PP, que sostiene al lehendakari, y descartó nuevos acuerdos tras las elecciones del 22 de mayo. A eso se sumó una valoración sobre el tiroteo en Francia que tampoco agradó al Gobierno autónomo. El portavoz socialista, José Antonio Pastor, candidato en Vizcaya; y el consejero de Interior, Rodolfo Ares, pidieron una clarificación contundente.
El comunicado habla por sí solo. "El lehendakari y el Gobierno vasco no comparten las valoraciones y opiniones manifestadas por Jesús Eguiguren. (...) Es la política que lidera el Ejecutivo vasco, apoyada por el PP, la que está llevando a ETA a su máxima debilidad. (...) Es por ello que se debe perseverar en esta estrategia hasta la desaparición de ETA
(...), un objetivo esencial e irrenunciable que se mantiene por encima de divergencias puntuales".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 16 de abril de 2011