En este chalé embargado a Pelopincho, cerca de Santiago, fue localizado un botín de más de un millón de euros, joyas y armas. Estaban escondidos en una habitación contigua a su despacho, al que se accedía mediante un mando a distancia.
MÁS INFORMACIÓN
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 24 de abril de 2011