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Cospedal amaga con romper el pacto si no se ilegaliza a los "acólitos" de ETA

El PP mantiene la presión sobre el PSOE a cuenta de la política antiterrorista y la fuga del etarra Antonio Troitiño. Aunque con tonos diferentes. Jaime Mayor, máximo exponente del ala dura en este asunto, insistió ayer, después del último comunicado de ETA, en que hay un proceso de negociación en marcha entre el Gobierno y ETA. En Onda Cero Mayor llegó a decir: "Cada media hora me reafirmo más" en la idea de la negociación, que el propio Mariano Rajoy ha descartado.

Dolores de Cospedal, la secretaria general, no avaló a Mayor -tampoco lo desautorizó- pero sí presionó al Gobierno. Llegó a decir que el Ejecutivo "tiene la responsabilidad de hacer todo lo que está legalmente en su mano" para impedir que ETA o cualquiera de "sus acólitos", en referencia a Bildu, se presente a las elecciones de mayo. Si no logra impedirlo, el Gobierno estaría poniendo "en peligro" el pacto contra el terrorismo, que quedaría "muy dañado".

Javier Arenas, hombre fuerte del partido, no llegó tan lejos, pero sí presionó. Dijo en Mairena de Aljarafe (Sevilla) que el comunicado prueba que los etarras "siguen siendo los mismos y sus objetivos siguen siendo los mismos", por lo que el Gobierno "debe ratificar su voluntad de derrotar" a la banda.

En realidad, pese a las críticas en público, ambos partidos mantienen en privado una cierta sintonía sobre la estrategia a seguir para tratar de impedir que Batasuna se presente a las elecciones. Tanto que ninguno de los dos partidos cree que el pacto antiterrorista esté en peligro realmente.

Caamaño da las cifras

Mientras Arenas insistió en esa idea de que el Gobierno debe ratificar su voluntad de acabar con la banda, el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, exhibió en un mitin en Santa Uxía de Ribeira (A Coruña) las cifras de la lucha antiterrorista con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Desde 2004, explicó, han sido detenidas cuatro cúpulas de ETA y 725 etarras, "ocho por mes". Caamaño aseguró que el Gobierno sigue "luchando en todos los frentes".

El ministro sostuvo que cuanto más se avanza hacia el fin de ETA "más nervioso se pone el Partido Popular" que, agregó, "hace cualquier cosa para evitar reconocer que la política del Gobierno es la más eficaz en la lucha contra ETA".

Caamaño defendió en relación con la excarcelación de Troitiño que hay que dejar a los jueces que decidan, porque en eso consiste el Estado de derecho.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 25 de abril de 2011