El inspector José María Ballesteros, al que el equipo de investigación del caso Faisán le atribuye haber proporcionado el teléfono móvil por que el se dio el chivatazo a la red de extorsión de ETA, aportó ayer como prueba los pantalones que llevaba ese día. Son unos tejanos de color gris claro, lo que le exculparía puesto que Joseba Elosua dijo quien le entregó el movil vestía traje oscuro.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 30 de abril de 2011