El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha sentenciado que el migrante que incumpla una orden de expulsión no puede ser encarcelado porque violaría sus derechos humanos. De esta manera, Italia debe poner en libertad a la persona que originó este caso y enmendar su legislación. Los 27 Estados miembros de la UE dan un paso adelante en la vanguardia de la defensa del migrante que lo único por lo que lucha es por un futuro mejor para él y su familia. Estados Unidos sigue encarcelándolos sin pensárselo dos veces.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 1 de mayo de 2011