La mayoría sindical de la Ertzaintza cortó ayer por lo sano y rompió con Interior, tras varias semanas de advertencias y protestas. La centrales Erne, Esan, Sipe y Euspel acordaron abandonar todos los órganos de negociación con el departamento, incluida la denominada Mesa 103, que regula las condiciones laborales de los agentes, y el Consejo de la Policía vasca. Siguen así la estela de la central nacionalista ELA, que la pasada semana suspendió su participación "en todos los foros de representación". Solo CC OO mantiene el hilo directo con la consejería.
A través de un comunicado, la mayoría sindical criticó que la reunión convocada anteayer por Interior para poner fin al conflicto laboral supuso, en realidad, una "nueva tomadura de pelo, otra mentira". "Fue una cortina de humo, ya que no se aportó ninguna propuesta nueva a las reivindicaciones exigidas", lamentaron los sindicatos, que demandan un nuevo convenio, ya que el actual suma cuatro años prorrogado.
Las cuatro centrales convocaron como respuesta una nueva concentración reivindicativa. En esta ocasión, se desarrollará frente a la sede de Lehendakaritza, en Vitoria, el próximo día 17, coincidiendo con la celebración del Consejo de Gobierno. Quieren así reflejar las acusaciones que lanzan al lehendakari, Patxi López, a quien sitúan además como responsable "de lo que pueda acaecer" durante la jornada electoral del domingo 22, como consecuencia del "malestar existente" entre los agentes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 12 de mayo de 2011