Los partidos suspendieron ayer la campaña electoral y se unieron a las instituciones para mostrar su solidaridad con Lorca y las víctimas del terremoto que azotó esta localidad murciana a 200 kilómetros de la Comunidad Valenciana. La Diputación de Alicante guardó cinco minutos de silencio en recuerdo de los fallecidos y José Joaquín Ripoll expresó la solidaridad de los alicantinos con Murcia. En Valencia, el presidente Francisco Camps y la alcaldesa Rita Barberá fueron más lejos y ofrecieron, por separado, todo su apoyo a Murcia, porque fue una región que se volcó cuando la capital sufrió la devastadora riada de 1957.
Todos los partidos mostraron sus condolencias y solidaridad con las familias afectadas. El PP lo hizo a través de su secretario general, Antonio Clemente. Los socialistas lo hicieron a través de su candidato a la presidencia de la Generalitat, Jorge Alarte, que afirmó que "el único acto de campaña es la solidaridad con Lorca".
Mientras, en Castellón, el PSPV y del Bloc denunciaron que no fueron convocados al minuto de silencio convocado por el equipo de gobierno de la ciudad, que dirige el popular Alberto Fabra. "Normalmente, cuando hay una convocatoria de un minuto de silencio en la alcaldía, se avisa a todos los grupos políticos, desde el gabinete. Y eso, no ha ocurrido", confirmaron fuentes socialistas. El concejal del Bloc, Enric Nomdedéu, afirmó que lo ocurrido en Castellón por parte del equipo de gobierno del PP es "una grosería". El gabinete de Fabra, no obstante, insiste en que se avisó a todo el funcionariado a través de la Intranet.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 13 de mayo de 2011