En la Casa Blanca se esperaba ayer la dimisión del enviado especial para Oriente Próximo, George Mitchell, tras dos años al frente de una misión que no ha logrado sentar a los palestinos e israelíes en una mesa de negociaciones.
Exsenador por Maine y artífice del acuerdo de paz de Viernes Santo en Irlanda del Norte, George Mitchell, de 77 años, fue nombrado por Obama en su segundo día de mandato y desde entonces ha pasado la mayoría del tiempo intentando reactivar las conversaciones de paz entre árabes e israelíes. En los últimos meses su actividad se ralentizó ante los levantamientos en los países árabes, que han dejado fuera del mapa al aliado de EE UU y pieza clave en las conversaciones de paz, el expresidente egipcio Hosni Mubarak.
No se espera que la Casa Blanca anuncie en breve un sustituto para Mitchell, cuya dimisión llega a una semana de la visita a EE UU del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 14 de mayo de 2011