CatalunyaCaixa cerró ayer un pacto con los sindicatos para reducir su plantilla en hasta 330 personas mediante bajas voluntarias, según informó la segunda caja catalana. Esta medida supone ampliar el ajuste de 1.300 personas que se acordó en 2010 tras la fusión de las cajas de Catalunya, Tarragona y Manresa. El acuerdo prevé que 250 personas salgan este año, y las 80 restantes lo harán el año que viene. Las bajas de 2012 podrían realizarse con el cierre de entre 40 y 70 oficinas, informa Europa Press.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 19 de mayo de 2011