De menos a más. Así ha planificado su campaña el PNV, al menos en lo que a escenarios se refiere. Los nacionalistas afrontan la recta final en las plazas que ven estratégicas para sus intereses. Con la exigente pretensión de conservar las tres Diputaciones como trasfondo, sus miras se centran en el plano municipal, único en el que pueden ganar terreno. Las tres capitales y la Margen Izquierda, bastión del PSE, son los objetivos más codiciados.
Vizcaya se presenta como escenario decisivo. El candidato a diputado general, José Luis Bilbao, apura una campaña de casi un centenar de actos que en las últimas horas le ha llevado a municipios como Muskiz, cuya alcaldía confía en recuperar el PNV, o Santurtzi y Bermeo, donde aspira a mantenerse tras conseguirlas en 2007.
El presidente del partido, Iñigo Urkullu, completó ayer el despliegue en Barakaldo, la principal ciudad tras las capitales, donde su partido no gobierna desde la primera legislatura democrática. "Hasta hace dos años Euskadi crecía más que Europa. Ahora está varada. Con el pacto PSE-PP Euskadi está estancada", sostuvo Urkullu.
El cierre de la campaña se reservará mañana para las tres capitales. En San Sebastián y Vitoria, con actos antes del mediodía. El objetivo es que la cúpula del PNV pueda reunirse por la tarde en Bilbao, donde el mitin final congregará a Urkullu y los candidatos a las principales alcaldías y las Diputaciones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 19 de mayo de 2011