Pagaron 46.000 euros por el curso de controladores, pero los 46 alumnos que recibieron ayer su título irán al paro al menos hasta enero de 2012. Son los primeros controladores españoles desempleados tras el curso de formación en la empresa pública SENASA. Hasta el pasado año, los seleccionados no pagaban la escuela y eran contratados inmediatamente por AENA para completar sus estudios tras una dura fase de selección. Los profesores eran controladores españoles, pero en esta ocasión fueron contratados en Reino Unido y países nórdicos. Toda la formación se ha dado en inglés. Los 46 alumnos-controladores titulados tendrán que enviar sus currículos a las empresas que finalmente ganen el concurso en marcha para proporcionar el servicio de control de torre en 13 aeropuertos.
Como no se resolverá hasta octubre, según el calendario que maneja AENA, hasta ese mes no sabrán a quién pedir un puesto de trabajo. En el mejor de los casos, no empezarán a cobrar un sueldo hasta enero, cuando empiecen a hacerse cargo de Alicante, Cuatro Vientos y Fuerteventura las nuevas empresas. "Pero como AENA calcula que la mitad de los actuales controladores optarán por seguir en sus puestos, no vamos a tener más de 30 plazas disponibles, y ya habrá una segunda promoción", se queja Blai Andreu, de 33 años, hasta ahora ingeniero informático. Y eso para cobrar mucho menos que los controladores que trabajan en AENA.
"La gran pregunta: cuánto vamos a cobrar. No tenemos ni idea, y la mayoría hemos pedido un crédito para pagar el curso", dice Almudena Hernández, de 32, arquitecta técnica. Ambos van a intentar conseguir un trabajo en verano como técnicos de operaciones en algún aeropuerto. Como controladores en AENA "no tienen ninguna posibilidad" ya que "tiene controladores de torre de sobra", según un responsable de SENASA.
"Esto es una semiestafa", proclama indignada Blanca Cabrera, madre de otro alumno, "SENASA es pública y había prometido formar controladores solo en función de la demanda". Este año serán 192 los formados en total, y el mismo número en 2012.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 20 de mayo de 2011