Cuanto más verde sea una empresa, más posibilidades tendrá de lograr un contrato de la Administración pública. Así lo establece el proyecto de ley de Cambio Climático aprobado ayer por el Gobierno en su reunión semanal, que recoge las cláusulas que se incorporarán en los pliegos de condiciones para incentivar a este tipo de compañías.
Las instituciones otorgarán beneficios fiscales a aquellas firmas que desarrollen tecnologías ambientales y a las que se dediquen a la protección del medio ambiente.
El resto de medidas abarcan distintos ámbitos, como el del urbanismo con criterios bioclimáticos, el impulso a la reforestación con especies autóctonas que absorban mejor el CO2 que otras, o la minimización de los desplazamientos entre poblaciones. El documento recoge, además de aspectos preventivos, iniciativas para adaptar Euskadi al cambio climático y para sensibilizar a la sociedad en torno a esta problemática.
La ley posibilita que quienes realicen actividades públicas o privadas se inscriban en un registro de reducciones voluntarias de emisiones. Este registro recogerá públicamente los compromisos que tomen personas u organizaciones sensibilizadas en torno a este problema y se convertirá en una vía de acceso a incentivos que generen las Administraciones públicas para impulsar la reducción de emisiones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 25 de mayo de 2011