Caja Mediterráneo (CAM) obtuvo un beneficio consolidado de 39,8 millones de euros en el primer trimestre de 2011, lo que supone un 49,8% menos respecto al mismo periodo de 2010, que fue de 79,3 millones de euros. Fuentes de la entidad atribuyen el descenso a la actual situación de crisis y a un "entorno marcado por un estricto ajuste de márgenes y reducción de tipos", según explicó un portavoz.
CAM presentó ayer ante su Consejo de Administración en Alicante estos resultados. En un comunicado de prensa, la entidad informó de que "la cobertura por fondos asciende al 62%, una de las más altas del sector, mientras que la cobertura genérica se sitúa en niveles regulatorios máximos a cierre del primer trimestre, con un 124 %".
El índice de dudosidad de CAM, que incluye créditos morosos y otros riesgos, se sitúa en el 8,5 %. El saldo dudoso disminuye en el año en 93,2 millones de euros, lo que supone una mejora del 1,9 % en el primer trimestre.
El coeficiente de solvencia se sitúa en un 8,54 %, con unos recursos propios de 4.120 millones de euros a cierre de marzo. El capital principal de la entidad alcanzará un 10,7%, incluyendo los 2.800 millones de euros procedentes del FROB.
María Dolores Amorós, directora general de CAM, explicó que el Plan de Recapitalización que ha presentado Caja Mediterráneo al Banco de España permitirá situar su nivel de eficiencia "por debajo del 50 %, con un nivel de ahorro recurrente de más de 200 millones de euros anuales de aquí al año 2015".
CAM formalizó 37.261 nuevas operaciones crediticias por importe de 1.573 millones de euros, de los que 1.233 se destinaron a empresas. La cartera crediticia gestionada por CAM alcanza los 54.119 millones de euros, un 5,9 % menos que en el mismo periodo del año anterior. El 67% del crédito gestionado está cubierto con garantías reales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 28 de mayo de 2011