El BNG y el PSOE de Pontevedra empiezan hoy las negociaciones en las que se dilucidará si los socialistas formarán parte del nuevo Gobierno local o se limitarán a apoyar la investidura del nacionalista Miguel Anxo Fernández Lores. Aunque el Bloque, que ha aumentado su representación en la corporación en cuatro escaños hasta empatar con el PP, insiste en que su interés es "conseguir el Gobierno más estable posible para los próximos cuatro años", el portavoz del PSOE, Antón Louro, asegura que su participación en el Gobierno aún no está decidida.
"Hay que construir un programa de gobierno para cuatro años. Si el nivel de entendimiento es bueno, contemplamos la posibilidad de entrar en el Gobierno, pero la otra posibilidad no está descartada", explica Louro, que asegura que la decisión del BNG de Vigo de quedarse fuera del Gobierno de la ciudad no condicionará a los socialistas en Pontevedra. "Cada ciudad tiene sus peculiaridades", avisa, y anticipa que si finalmente el pacto no prospera, el PSOE no hará una oposición total al BNG. "Si apoyamos a un señor para ser alcalde, después no podemos hacerle imposible que gobierne; hay que ser coherentes".
En el PSOE ya avisan que para que el acuerdo llegue a buen puerto deberán respetarse tres "ejes irrenunciables". Se trata de "la dinamización económica, la planificación urbanística y la creación de infraestructuras industriales que la ciudad necesita".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 3 de junio de 2011