Las espirales eléctricas ya estaban en el Zuma de Neil Young. El siguiente paso, convertir esa red en algo atmosférico, es la herencia que Jim James ha asumido al mando de My Morning Jacket, argumentando sobre la experimentación sonora en mítines-barra-discos llenos de giros inesperados: psicodelia, jazz, funk, soul... En ese sentido, Circuital es el trabajo más equilibrado de la banda, sobre todo porque las melodías toman el control. Pero la clave de su poder es la voz de James (sus falsetes funk restan la seriedad de ese don para la trascendencia en los graves) y sus interpretaciones. Sí, seguimos sin discos menores en la carrera de los de Kentucky.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 3 de junio de 2011