Un padre y un hijo son los supuestos autores de primer crimen registrado este año, en el que murió un hombre de nacionalidad colombiana de 53 años. El motivo del asesinato es que ambos familiares decidieron no pagar el medio kilo de cocaína que habían comprado a la víctima, según informó ayer la Comandancia de la Guardia Civil.
La víctima, que iba indocumentada, fue hallada por un ciclista la mañana del 1 de enero en una cuneta del kilómetro dos de la M-219, en el término municipal de Loeches. Al hombre lo habían degollado. También presentaba cuatro heridas por arma blanca en la cabeza.
Los agentes identificaron al fallecido como una persona que se dedicaba a traficar con droga a mediana y pequeña escala, por lo que centraron sus pesquisas en este entorno. Las investigaciones dieron su resultado a finales de mayo, cuando lograron detener a un hombre de 50 años de origen uruguayo nacionalizado español cuyas iniciales corresponden a O. J. L. C. y a su hijo A. E. L., de 23 e igualmente español de origen uruguayo, como supuestos autores del crimen.
Las pesquisas permitieron demostrar que las tres personas, la víctima y sus dos supuestos asesinos, viajaban en el mismo vehículo en dirección a Campo Real. En ese momento, pincharon, por lo que los tres bajaron a cambiar la rueda. Fue el momento que aprovechó, según la versión de la Guardia Civil, el padre para degollar a su vendedor. Después se deshicieron del cadáver tirándolo en la cuneta.
Los investigadores han logrado recuperar diversas armas de fuego y navajas, entre las que se encuentra supuestamente la utilizada en el homicidio. La titular del juzgado de instrucción número 3 de Arganda, que instruye el caso, ha ordenado el ingreso en prisión de ambos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 4 de junio de 2011