Mientras 28.000 alumnos se jugaban el futuro universitario, otros decidieron quitarse el estrés lanzándose desde una grúa a una altura de 60 metros, informa F. J. Barroso. Una marca de cereales eligió este novedoso sistema para que unos 100 alumnos se evadieran durante unos minutos de los exámenes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 7 de junio de 2011