La retirada de los bordillos instalados en los aledaños de Gibraltar por el anterior equipo de gobierno de La Línea para cobrar un peaje se convirtió ayer en todo un acto simbólico de la nueva corporación. La alcaldesa, Gemma Araujo (PSOE), acompañada de los responsables políticos del PA, Angel Villar, e IU, Andrés Martín, presidieron la rotura y el levantamiento de los pivotes, que testimonian que el peaje ha muerto antes de nacer. La alcaldesa dijo que "supone acabar con uno de los símbolos del exalcalde del PP Alejandro Sánchez y de su política de hostigamiento hacia Gibraltar". En la fotografía, dos operarios desatornillan un pivote.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 22 de junio de 2011