La ofensiva terrorista de los talibanes contra las tropas españolas se recrudece a medida que se acerca la fecha de retirada de Afganistán, prevista para el verano de 2012. Un ataque con más de 20 kilos de explosivo a las 9.45 (hora española) mató ayer a dos militares del contingente español -el sargento Manuel Argudín Perrino, de 34 años, de Gijón, casado y con dos hijos; y la soldado Niyireth Pineda Marín, colombiana, de 31, con un hijo- e hirió a otros tres que viajaban en un vehículo blindado Lince. El atentado
se produjo a 20 kilómetros al norte de la capital de la provincia de Badghis, bajo responsabilidad española.
El suceso llega ocho días después de que otra bomba hiriese a cuatro militares -dos de ellos quedaron mutilados- y a un intérprete español. El blindaje del Lince, diseñado para resistir la onda expansiva de una mina, no fue suficiente para proteger a sus ocupantes.
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Páginas 10 y 11
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 27 de junio de 2011