La familia real española no acudirá a la boda de Alberto de Mónaco. Inicialmente, los príncipes de Asturias eran quienes iban a asistir. Pero la Casa del Rey, que también había admitido semanas atrás esta posibilidad, anunció ayer que no viajarán a Montecarlo. La razón oficial es que la invitación le ha sido cursada al rey de España, quien todavía no ha retomado su agenda tras ser operado de la rodilla.
En la boda de Londres se produjo una situación similar. La invitación se hizo a los reyes de España, como máximos representantes de la familia real, y se decidió que acudiera la Reina, acompañada de don Felipe y doña Letizia. En esta ocasión se ha seguido estrictamente el protocolo y no se ha gestionado otra representación. Probablemente ha influido que no se trata de una boda real y sí principesca. Al enlace de los príncipes de Asturias asistieron Alberto de Mónaco, su hermana Carolina y el entonces marido de esta, Ernesto de Hannover. Sí se ha confirmado la presencia al enlace del presidente francés, Nicolas Sarkozy, aunque no se ha precisado si irá acompañado de su esposa, Carla Bruni, que se encuentra ya en avanzado estado de gestación. También estarán los reyes de Suecia y sus hijos; Luis Alfonso de Borbón, en calidad de heredero de un hipotético trono de Francia; el presidente de Líbano, Michel Sleiman, y la presidenta de Irlanda, Mary McAleese; Jacques Rogge, presidente del COI, y los actores Demi Moore, Ashton Kutcher, Roger Moore, Mel Gibson y Brooke Shields.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 28 de junio de 2011