Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

La Junta niega el ERE a la fábrica Locsa de Córdoba

Los 120 trabajadores de la fábrica de laminados de zinc y cobre que la empresa Locsa KME tiene en Córdoba han ganado una batalla. La Junta ha rechazado el Expediente de Regulación de Empleo que en abril anunció KME, de capital alemán e italiano. Desde entonces, los trabajadores mantienen una acampada junto a la factoría.

"La Consejería de Empleo ha resuelto no estimar la solicitud de extinción presentada por el grupo KME para la planta Locsa en Córdoba, por lo que, de momento, no se producirá el cierre de la fábrica ni se producirá ningún despido", señaló ayer CC OO.

"La empresa va a recurrir de manera inminente", reconocía Francisco Pozuelo, presidente del comité de empresa. De todas maneras, el representante de los trabajadores no podía ayer ocultar la esperanza que ha reavivado esta resolución de Empleo. "Tenemos que esperar y ver qué ocurre. Decidir si levantamos el campamento y seguir luchando por el mantenimiento de la fábrica y la producción". Pozuelo, sin embargo, señaló que los trabajadores todavía no han cobrado la nómina de junio y que la empresa ha dejado de suministrarles materia prima. Los obreros mantienen que, tras la decisión de cerrar, se encuentra un episodio de deslocalización empresarial. Acusan a KME de no querer vender la línea de producción para librar de competencia sus propias fábricas en Italia.

La negativa de la empresa a seguir con la producción es una de las razones por las que Empleo rechaza el ERE. La Junta entiende que la empresa no propone medidas de saneamiento financiero para "superar la falta de rentabilidad alegada de la explotación y su viabilidad, limitándose a proponer el cierre y la extinción de toda la plantilla".

* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 5 de julio de 2011