Justo el día que el nuevo alcalde de A Coruña, Carlos Negreira (PP), invitaba a los indignados de la ciudad a levantar su acampada de la plaza del Obelisco, la asamblea del movimiento ha acordado continuar en el lugar "de forma indefinida". Y eso que Negreira ha ratificado su "simpatía" por el movimiento "desde el inicio". "La retirada sería una buena aportación", añadió, "e iría en dirección contraria a la violencia que se ha mostrado en momentos puntuales". No concretó en cuáles.
Después de realizar una "reestructuración física" del espacio en los últimos días, informa Europa Press, los acampados de A Coruña anunciaron que centrarán sus labores en evitar desahucios en viviendas -facilitan la dirección electrónica desahucios.coruna@gmail.com- y organizar a los barrios. En el Obelisco, que consideran el lugar "idóneo" para seguir en contacto con la sociedad de la urbe, duermen actualmente cinco o seis personas. Por el día, tres decenas colaboran en el desarrollo de las ideas y actividades de la movilización.
Durante el pasado fin de semana levantaron las tiendas las personas que ocupaban la Praza do Obradoiro, en Santiago, y también los indignados de Pontevedra. Estos últimos presentaron ayer una instancia en el Ayuntamiento en la que exponen sus necesidades. Los antes acampados solicitan un local social, un punto fijo de información y una entrevista con las autoridades locales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 5 de julio de 2011