La designación de San Sebastián como Ciudad Internacional para el año 2016 me parece excelente. Algunas otras ciudades -a través de sus ediles- se han manifestado contrarios a esta decisión alegando cuestiones políticas sin valorar que la decisión se ha tomado no solo por entidades españolas sino por un jurado colegiado internacional, a la vista de un proyecto objetivo, valorado según los criterios señalados en la correspondiente convocatoria, y todo ello independientemente de los resultados del 22-M.
Dándose la circunstancia que la propuesta de la ciudad donostiarra se ha preparado y presentado con anterioridad a esta fecha, con el sello inconfundible de Odón Elorza del Partido Socialista Vasco. A mayor abundamiento, para los duros de mollera, les recuerdo que este tipo de designaciones no se hacen contra nadie sino a favor de, en este caso, a favor de San Sebastián. Alberto Belloch, alcalde de Zaragoza, por sus declaraciones impertinentes no es por ello mejor alcalde sino un mal perdedor.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 9 de julio de 2011