El aumento del turismo en Euskadi es constante y, por consiguiente, la oferta debe estar cada vez más diversificada. A los conocidos productos culturales y de playa se van sumando otros más rurales, destinados al relajo y al disfrute de la naturaleza. Gorbeia Central Park, inspirado en el parque neoyorquino, es una de las respuestas a las nuevas demandas turísticas. Ubicado en el parque natural que linda entre Álava y Bizkaia, la propuesta fue ideada por la cuadrilla Zuia y la Asociación de Desarrollo Rural Gorbeialde y es el fruto de un intenso trabajo entre instituciones y empresas privadas de la zona.
En total, Gorbeia Central Park ha dividido su proyecto, en marcha desde ayer, en 19 originales experiencias sensoriales que satisfacen el gusto de los más románticos, pero también el de los más aventureros, bohemios o, simplemente, el de los que quieren descansar en un silencioso entorno.
Una de las posibilidades es desayunar acompañado por expertos montañeros en un refugio de montaña mientras se ve el amanecer. Quizá sea la mejor opción para reponer fuerzas si se pasa la noche anterior en vela entre árboles, disfrutando del sonido de los animales, inusitadamente audible a estas horas. También sería el colofón a varias horas mirando el cielo si el cliente escoge una romántica cena mientras disfruta de una sesión de astronomía. O el añadido previo a una sesión de spa.
Gorbeia Central Park ofrece también otras formas de hermanarse con la naturaleza. A un sendero culinario, un pic-nic tras un paseo en bici o una sesión reparadora a base de plantas, se añaden otras propuestas más rompedoras. Una sesión de pilates, yoga o tai-chi desde lo alto de una colina o en la profundidad de los bosques; espacios habilitados para disfrutar de la siesta, o la posibilidad de ser pastor, un oficio tradicional del Gorbea, durante un día.
Entre otras opciones gastronómicas, el turista podrá disfrutar de un desayuno a base de productos tradicionales como la miel, la mermelada, el queso o el chorizo. Igualmente, Gorbeia Central Park propone irse de pintxos con las cuadrillas de la zona, comer en restaurantes típicamente vascos un bacalao al pil-pil o disfrutar de pequeños manjares mientras se ve una exposición.
Otras posibilidades de folclore incluyen ir de romería por ermitas y pueblos y aprender a tallar maderas. Para aquellos que solo deseen descansar, la oferta de casas rurales es amplia, y los que solo deseen opciones atrevidas, podrán iniciarse en la escalada en las Peñas de Oro o visitar las cuevas de Baltzola.
"El turista quiere que le sorprendan y le enamoren. Liderada por la Agencia Vasca del Turismo, Euskadi tiene que ser un destino multiexperiencial, un contenedor de iniciativas", concluyó ayer la viceconsejera de Turismo, Pilar Zorrilla, en la presentación del Gorbeia Central Park, celebrada en el mercado de la Ribera de Bilbao.
Algunas opciones
- Termo-amanecer: desayuno en un refugio mientras se ve amanecer.
- G-astronomía: una cena acompañada de una sesión astronómica.
- Pastor por un día: posibilidad de aprender una profesión que aún se mantiene en el Gorbea.
- Siestódromos: espacios calmados perfectos para dormir entre árboles durante unos minutos
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 14 de julio de 2011