Un año después de que una veintena de municipios de Castellón afectados por la sangría de despidos en el sector azulejero constituyeran finalmente, y tras meses de reuniones, el pacto territorial por el empleo en los municipios cerámicos y su área de influencia, son pocos los que realmente han cumplido con sus compromisos. Y la sorpresa se la han llevado los sindicatos que forman parte del consorcio rector: tan sólo seis ayuntamientos han aportado los fondos necesarios para que el plan de acción eche a andar. Tampoco han cumplido con su parte de aportar la documentación y los datos reclamados.
El pacto por el empleo en los municipios cerámicos nació con el objetivo de buscar salidas ante los despidos de un sector que desde que comenzó la crisis ha destruido unos 8.000 puestos de trabajo en Castellón. Los dos sindicatos exigen que en la próxima cita que será en septiembre los 22 consistorios hayan depositado los fondos. Según UGT y CC OO, los consistorios que han hecho los deberes son los más pequeños. Ni Vila-real, ni Onda, ni L'Alcora -municipios que constituyen el triángulo azulejero de Castellón- han colaborado, a pesar de ser los más afectados. Vila-real debería haber ingresado ya 12.000 euros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 17 de julio de 2011