La autoconcesión de préstamos a bajo interés, en algunos casos al 0%, por parte del extinto consejo de administración de Caja Mediterráneo (CAM) es uno de los extremos que más polémica ha generado tras la nacionalización de la entidad por el Banco de España.
Esta práctica, habitual en la mayoría de las cajas, ha sorprendido a algunos de los exconsejeros de la caja, que han expresado su "perplejidad" y, en paralelo, su desacuerdo. En este bando se sitúa el empresario de Novelda Jesús Navarro, dueño de la firma Carmencita, que entró en el consejo de la CAM en 2004.
Este consejero ha expresado su rechazo a esta práctica y mantiene que en su etapa como consejero únicamente ha solicitado un préstamo a la caja por un total de 38.000 euros y a un interés del 5,5%.
Entre 2004 y 2010, los consejeros de la CAM se autoconcedieron préstamos por un total de 161 millones. Los más beneficiados por estas operaciones fueron el empresario y expresidente del PP Aniceto Benito, y el expresidente de la caja Modesto Crespo, que gozó de un préstamo de cinco millones de euros al 2,5%.
La aprobación de estos ventajosos créditos era una facultad del presidente y de la directora general, María Dolores Amorós. Pero la Generalitat también tenía conocimiento de las operaciones. El Gobierno valenciano autorizó cada uno de estos préstamos de acuerdo con lo establecido en la Ley de Cajas Valencianas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 29 de julio de 2011