Las fuertes tormentas que se produjeron ayer se desplazaron desde el norte de Lleida y de Barcelona hacia el sureste.
Los registros fueron de 50,9 litros por metro cuadrado en el área de Sant Gervasi (Barcelona); 57,4 litros en L'Hospitalet; 46,8 en Alella y 43 litros por metro cuadrado en Mollet-Barri Santa Rosa, correspondiendo al periodo de máxima intensidad de la precipitación, entre las 15 y las 18 horas. Las fuertes tormentas incluyeron fenómenos de granizo en Tremp (Pallars Jussà) sobre las 15:36 horas, poco más tarde en Manresa (Bages), y sobre las 18:11 horas en Vilanova i la Geltrú (Garraf).
Posteriormente, la actividad tormentosa se desplazó hacia el noreste de Tarragona y hacia el mar.
El origen de esta situación de "acusada inestabilidad atmosférica" se debió a la presencia de aire frío, en niveles altos, afectando al noreste peninsular, unido a los vientos del sureste que a primera hora soplaron por la zona de Tarragona, favoreciendo la entrada de aire templado y húmedo. Esto desencadenó el aumento de la inestabilidad atmosférica dando lugar a la formación de una gran masa de "nubes de desarrollo" que a lo largo de su desplazamiento, inicialmente desde comarcas del interior, hacia el sureste provocaron fuertes "aguaceros tormentosos", en las horas centrales del día.
La situación atmosférica tiende a estabilizarse, aunque -al cierre de esta edición- se prevén aguaceros tormentosos en zonas del prelitoral durante la madrugada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 31 de julio de 2011