El acoso sostenido en el tiempo, según la titular del Juzgado número 3, Estela San José, le impidió llevar una vida normalizada y perjudicó, además de sus relaciones de pareja, el trato con su padre. En su declaración llevada a cabo en el Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo, San José Asensio dice que cree en la "libertad de expresión", pero que el agente Javier Martínez (bajo nicks como Tío de la Vara o Habemus) le ha "destrozado la vida durante año y medio".
Para sus padres "todo esto ha sido una auténtica vergüenza", por lo "público y notorio" de las calumnias, que según explica corrieron como un reguero de pólvora por todas las comandancias de las "provincias relacionadas" con ella "en un sentido o en otro". La juez llegó a sentirse en muchas ocasiones, durante actos públicos, señalada y cuestionada por la sociedad lucense. Hasta el punto de que renunció a acudir a celebraciones a las que estaba invitada por lo mal que la hacían sentirse las "miradas" y los "codazos de todo el mundo".
Muchas veces, dice San José, salió "llorando de los juzgados", se "retrasó considerablemente" en su trabajo y solo quería encerrarse en casa. Su "honra personal", declara, "se ha visto dañada" y lo ha "soportado" como ha "podido", pero, según subraya, no puede "permitir" que nadie "cuestione" su actividad profesional, como supuestamente sucedió en los foros citados en la denuncia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 1 de agosto de 2011