Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

Un vecino de San Sebastián muere corneado en un encierro en Lodosa

Félix de Luis Morentín, un vecino de San Sebastián de 74 años, murió ayer como consecuencia de la cornada en el cuello que le propinó un novillo escapado de un encierro en Lodosa, que estos días celebra sus fiestas patronales.

El jubilado, que pasaba largas temporadas en la localidad navarra, de la que era natural, se encontraba viendo el encierro en un portal con su esposa cuando se vio sorprendido por el novillo, de la ganadería Prieto de la Cal. El animal rompió el vallado de madera de protección y arremetió contra varias personas.

El suceso se produjo sobre las 9.20, cuando al ir a entrar la manada en la plaza de toros los astados golpearon con fuerza en una zona curva del vallado las protecciones y salieron al exterior del recorrido "a una zona ciega, sin escapatoria posible", según informó el Gobierno foral. La manada volvió en dirección contraria, ocasionando momentos de peligro y haciendo caso omiso a los pastores y mansos de cola. Dos reses golpearon de nuevo con fuerza el vallado, consiguiendo romperlo en parte y escapar.

Una de ellas fue la que mató a Morentín y embistió además a otros espectadores, entre ellos un joven de 25 años J.A.M., vecino de Nájera (La Rioja), que debió ser hospitalizado en Estella con diversos traumatismos de pronóstico reservado, y mujer de 62 atendida en el centro de salud de la propia Lodosa con contusiones en una rodilla. El novillo fue neutralizado después con dardos anestésicos disparados por el propio ganadero.

Doble vallado

El alcalde de Lodosa, Pablo Azcona, expresó a Efe la consternación de la localidad por una "desgracia tremenda, sobre todo para la familia, pero también para todo el pueblo".

Sobre la seguridad del recorrido, recalcó que el encierro está protegido por un doble vallado en algunos tramos, aunque precisamente donde ocurrió el suceso no existe tal refuerzo "porque no es necesario para novillos de este tipo".

El vicepresidente primero del Gobierno navarro y consejero de Interior, Roberto Jiménez, indicó que los recorridos y los permisos de los encierros siempre están supervisados por la Brigada de Juegos y Espectáculos de la Policía Foral. "Creo y quiero pensar que las cosas estaban correctamente. Tengo gran confianza en los profesionales y quedo a la espera de lo que diga la investigación", dijo.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 3 de agosto de 2011