Casi cuatro años han durado las diligencias de investigación que abrió la Fiscalía de la Audiencia Nacional a raíz de una denuncia del entonces alcalde de Pedreguer, Andrés Ferrer, del PP, en decidir que la foto boca abajo del rey Juan Carlos I colocada en un mural de la población no es delito porque "carece de la intensidad antijurídica necesaria para estimar dañada públicamente la institución que Su Majestad el Rey representa, y no resulta procedente ejercer acciones penales".
El mural en el que, como sucede en Xàtiva con un cuadro de Felipe V, Juan Carlos I apareció colocado boca abajo fue promovido por los colectivos Endavant, Maulets y Sindicat d'Estudiants del Països Catalans y autorizado por el pleno con los votos del Bloc, PSPV y Aixa, aunque solo duró cuatro días hasta que sufrió ataques y quedó descompuesto.
Los promotores de la obra en una pared de la Casa de Cultura pretendían recordar la Guerra de Sucesión y la pérdida de los Fueros del Reino de Valencia. Pedreguer ha sido la única localidad valenciana que se ha adherido a la Tercera República.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 5 de agosto de 2011