Industria va a destinar 4,9 millones de euros a fondo perdido, que gestionará el Ente Vasco de la Energía (EVE) para fomentar instalaciones para el aprovechamiento energético de las fuentes renovables. Los diferentes programas diseñados incluyen una dotación propia del EVE de 2,1 millones, a los que se suma el programa de ayudas del departamento, que cuenta con una dotación de 1,7 millones, así como otros 1,1 millones adicionales aportados por el Instituto de Diversificación del Ahorro Energético (IDAE), dependiente del Gobierno central.
Las ayudas financian de forma general entre el 30% y el 35% de la instalación. Las tecnologías susceptibles de recibirlas son la energía solar fotovoltaica, la biomasa térmica, el intercambio geotérmico, las instalaciones de biogás, los puntos de suministro de biocarburantes, los generadores eólicos, las microcentrales hidroeléctricas, así como otras fuentes de energía limpias y proyectos singulares y estudios de viabilidad y mediciones, según precisó ayer el EVE en un comunicado.
Las instalaciones prescritas con obligatoriedad en el Código Técnico de la Edificación, como por ejemplo la energía solar térmica, son consideradas instalaciones no subvencionables.
Por este motivo, el año pasado se registró una disminución del 22% en el número de solicitudes de subvención para este tipo de fuentes energéticas con respecto a 2009. La reducción más importante en este sentido se dio en las instalaciones solares térmicas, aunque se ha apreciado un posible trasvase a instalaciones de biomasa, principalmente calderas de biomasa para calefacción. También destaca el aumento de la tecnología del intercambio geotérmico, que ha registrado un crecimiento del 44% con respecto a 2009.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 6 de agosto de 2011