Los dos concejales que han abandonado la xenófoba Plataforma per Catalunya (PxC) en Salt (Gironès) hicieron ayer efectiva su nueva condición de ediles no adscritos a ningún grupo. Carles Bonet, exportavoz, y Joana Martínez, número 3 de lista, alegaron "razones de conciencia, ética y moral". Martínez recibió presiones del partido por salir con un hombre camerunés y Bonet argumentó que PxC le exigía demasiada radicalidad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 17 de agosto de 2011