Moussa Ibrahim, un portavoz del Gobierno libio, emitió anoche un comunicado en televisión para desmentir todos los rumores que hablaban de la huida de Muamar el Gadafi y la llegada de los rebeldes a la capital. Ibrahim admitió que "pequeños grupos armados" de rebeldes habían entrado en Trípoli, pero indicó que ya habían sido arrestados. "Gadafi sigue siendo vuestro líder y los rebeldes serán perdonados si abandonan las armas", añadió Ibrahim.
El Gobierno emitió mensajes a los teléfonos móviles de los habitantes de Trípoli para animarles a salir a la calle y disparar si veían rebeldes armados. Ibrahim insistió en que los rebeldes no habían tomado la capital. "Hay miles de personas en los alrededores de Trípoli dispuestas a defenderla", añadió.
Después, la televisión estatal libia emitió un discurso de Gadafi que pronunció a través de un teléfono. Gadafi felicitó a los libios por haber salido a matar a las "ratas" rebeldes. "La gente besa mis fotografías, yo soy el padre, soy el líder".
Horas antes del discurso, las agencias internacionales de noticias informaron de que en Trípoli se oían tiros de artillería pesada y de que en varios distritos de la capital se habían registrado manifestaciones contra Gadafi. En Bengasi, la capital de los rebeldes, miles de personas celebraban en la calle los últimos acontecimientos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 21 de agosto de 2011