Un agente de la Guardia Civil murió ayer tras ser atropellado por un coche mientras estaba auxiliando la avería mecánica de otro vehículo en el kilómetro 221 de la autovía A-31, que une Alicante y Madrid, a la altura de Monforte del Cid.
Los hechos ocurrieron pasada la una y media de la mañana, cuando el policía se dirigía ya hacia el puesto base de Alicante después de haber cumplido con su jornada laboral, que acababa a las 14.00 horas. De camino hacia el cuartel descubrió un vehículo averiado en la carretera y se detuvo para atender a sus ocupantes.
Otro coche que también circulaba en la misma dirección arrolló al agente, que murió en la misma carretera antes de poder ser trasladado a un centro hospitalario, aunque al lugar del siniestro acudió una ambulancia y un helicóptero medicalizado que no llegó a intervenir por el fallecimiento del herido.
El conductor que lo embistió se detuvo para tratar de colaborar en el socorro del guardia civil, lo que ha llevado a concluir que el accidente se produjo de manera fortuita.
El accidente provocó más de dos kilómetros de retenciones en la dirección hacia Alicante de la autovía. El agente fallecido deja mujer y dos hijos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 26 de agosto de 2011