Las medidas contra la crisis
"Cuando cambian los hechos, cambio de opinión". Esta conocida cita del gran economista británico Keynes bien podría haber inspirado el viraje en política laboral que el Gobierno dio ayer. El segundo Consejo de Ministros extraordinario de agosto acordó suspender durante dos años los límites a la temporalidad y ampliar a los 30 años el uso de los contratos de formación.
El problema de la "generación pérdida", como la denominó el antiguo director del Fondo Monetario Internacional Dominique Strauss-Kahn, destaca dentro del drama general que supone el alto desempleo. La tasa de paro juvenil se sitúa en el 46,1% frente al 20,8% general.
Ben Bernanke dejó el tapón puesto en la botella de los estímulos monetarios a la economía. En su esperado discurso en la conferencia anual de banqueros en Jackson Hole, el presidente de la Reserva Federal evitó citar cualquier medida específica a la que podría acudir para apuntalar el crecimiento y el empleo.
El segundo trimestre fue una oportunidad perdida para la recuperación. Como ya anticiparon el Banco de España y el Instituto Nacional de Estadística, el PIB apenas creció un 0,2% respecto al arranque del año. Y el incremento interanual se quedó en el 0,7%, el primer retroceso desde la Gran Recesión.