El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, dejó ayer atrás la etapa de oscurantismo de su predecesor, Francisco Camps, que dimitió a finales de julio tras abrirse el juicio oral por haber recibido trajes de la trama Gürtel. Fabra, apenas un mes después de su elección, se reunió ayer con los portavoces de la oposición y les prometió que tendrán acceso a los expedientes de las contrataciones de la Generalitat con las empresas de la trama Gürtel o cualquier otra documentación que hayan solicitado a través de las Cortes sobre la que no haya ninguna restricción legal. Información que Camps les negó repetidamente.
La oposición se mostró escéptica con el anuncio y reclamó que el anuncio se concrete en hechos. Fabra se comprometió a que en los próximos días se fijará cómo se facilita a la oposición la documentación solicitada. "Tienen las puertas abiertas para poder mirar cualquier expediente", dijo el presidente valenciano.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 2 de septiembre de 2011