Un total de 2.394 vecinos de Teis (Vigo) lo advirtieron en 2002 en forma de alegaciones: el puerto deportivo de A Lagoa constituía un peligro para el emisario submarino que suministra agua a Cangas y Moaña. La Autoridad Portuaria de Vigo hizo oídos sordos y autorizó la marina, cuyos espigones se construyeron encima del colector. Desde entonces, una tubería que llevaba 20 años en funcionamiento sin registrar anomalías acumula cinco averías, todas ellas en la dársena de A Lagoa.
El último caso es el que ayer dejó sin suministro de agua a los ayuntamientos de Cangas y Moaña. La barcaza que trabajó en la reparación de la rotura se situó en la lámina de agua del puerto deportivo del presidente de Pescanova, que carece de licencia de actividad y sobre el que pesan varias órdenes de derribo. La Xunta, que se gastará 7,3 millones de euros en construir una nueva tubería, evitó ayer cualquier referencia a la causa de las reiteradas averías. Hasta el momento, la Consellería de Medio Ambiente apuntó al "envejecimiento del emisario y a la presión del agua" como origen de los reiterados problemas del colector.
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Las alegaciones presentadas por los vecinos en 2002 consideraban "muy grave" la construcción del puerto encima del emisario, "por las posibles consecuencias que las averías en dicha tubería pudieran provocar".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 3 de septiembre de 2011