Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

La lucha partidista y la ambigüedad de Rajoy

La "cumbre" de alcaldes y alcaldesas de capitales en defensa del corredor ferroviario mediterráneo congregó ayer en Castellón a once alcaldes de cinco autonomías y tres partidos diferentes (PP, PSC y CiU). El primer aviso llegó en boca del secretario general de relaciones Institucionales del Ministerio de Fomento, Fernando Puig, quien hizo un llamamiento en contra de las "voces discordantes" tras mostrar su "preocupación" por la posición de algunas autonomías que "cuestionan el corredor mediterráneo". Puig se refería así a las declaraciones de la presidenta de Castilla-La Mancha, Dolores de Cospedal que, al igual que Extremadura, Madrid y Aragón, apoyan el eje ferroviario central para conectar España con Europa. Puig calificó de "irresponsables" las contradicciones expuestas que "fragilizan nuestra postura negociadora frente a Europa".

Sin embargo, el presidente del PP de Castellón, Carlos Fabra, ya había exhibido el enfrentamiento interno del PP, al afirmar que en el caso de que De Cospedal hubiera manifestado sus preferencias como secretaria general no le "representaría". En cualquier caso, y pese a la pugna existente, ningún alcalde quiso entrar ayer en el enfrentamiento partidista.

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, sostuvo que el hecho de que "la señora Cospedal o la señora Rudi o el presidente de Extremadura estén defendiendo ese otro corredor a mí parece lo lógico porque están defendiendo su interés" y rehuyó cualquier valoración que insinuara un enfrentamiento interno. Aún así, el PP valenciano sabe que el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, no consiguió arrancar de su líder nacional, Mariano Rajoy, una postura clara sobre el corredor mediterráneo y la necesidad de que este se incluya entre las redes prioritarias.

Sin embargo, tampoco el alcalde de Barcelona, Xavier Trias (CiU), quiso manifestarse sobre la disyuntiva que existe entre los populares. "Me fijo en lo que pasa aquí, que es que hay gente del PP que le da todo el apoyo, y eso es lo que yo valoro y que creo que es importante". Por su parte, el único alcalde socialista del cónclave, el de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, indicó que "a pesar de las diferencias de partido, creo que en este territorio extenso, que es el Mediterráneo, tenemos unas oportunidades que hemos de aprovechar".

* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 8 de septiembre de 2011