La planta de transferencia de basura de Calp ha pasado de ser un problema a convertirse en un peligro medioambiental y de salubridad, además de estar inmersa en un círculo vicioso. El Ayuntamiento no le paga a la empresa adjudicataria Colsur, propiedad de Ángel Fenoll, imputado en el caso Brugal, desde hace casi tres años y le debe unos tres millones de euros. La mercantil no trata la basura para trasladarla a un vertedero mientras no cobre. El Seprona ha denunciado a Colsur ante la consejería de Medio Ambiente. Colsur ha demandado al Consistorio por no pagarle y el nuevo Gobierno local le ha abierto un expediente por su actitud.
Inmersa en este galimatías, la concejal de Medio Ambiente, Carole Saunders, de Calp Independientes-Los Verdes, asegura que "si anteriormente hubo un fraude, lo deberá discernir un juez, pero los contratos están para cumplirlos y estamos a punto de poder pagarle algo", si bien el Ayuntamiento tiene una deuda de 70 millones de euros y no será fácil que consiga liquidez de forma inmediata. Saunders pretende que un primer pago a Colsur pueda hacer que la planta retome la actividad "porque en la situación actual hay un evidente peligro", ya que la zona donde se ubica, en la Sierra de Oltà, es de especial protección medioambiental. Alguno de los propietarios de casas de campo en la zona, como Joaquín Bordes, lamentan "los olores y la suciedad que genera la basura acumulada". Bordes puso el caso en conocimiento del Seprona.
"Nosotros queremos rescindir el contrato", dice la edil, para lo que el Consistorio le abrió un expediente a principio de julio, aunque dos meses después todavía no se ha resuelto. Es lo que también pretende el PSPV, aunque los socialistas estiman que se podía haber hecho directamente porque "la báscula nunca ha funcionado y es un elemento esencial de fraude, una causa de rescisión automática de la adjudicación".
La adjudicación de la planta de transferencia de Calp a Fenoll en 1998 está siendo investigada en el juzgado de Dénia, donde en dos semanas comenzarán las declaraciones de los 11 imputados en esta pieza separada del caso Brugal. Además de Fenoll, están imputados el exalcalde popular Javier Morató, otros tres ediles de su Gobierno, dos funcionarios y Francisco Artacho, cuñado de uno de los concejales, entre otros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 8 de septiembre de 2011